Rebelde, porfiado y tenaz, obstinado en mantener un error. Salmo 78:8-9 nos dice: "Generación contumaz y rebelde; Generación que no dispuso su corazón, ni fue fiel para con Dios su espíritu." Una persona contumaz no es fiel a Dios. En Tito 1:10 nos dice algunas características del contumaz y dice así: "Porque hay aún muchos contumaces, habladores de vanidades y engañadores, mayormente los de la circuncisión, a los cuales es preciso tapar la boca".

    Ejemplo de personas contumaz, son aquellas que se les ha dicho que no es así como ellos dicen y sabiendo que no están correcto en su asunto, insisten en su error; y muchas veces no quieren buscar la verdad. Mencionaré un ejemplo específico dentro de mi corto tiempo en el Evangelio y usted le sumará a la lista de ejemplos de los cuales usted ha tenido experiencia propia. Un pastor de una iglesia prohibió a su congregación decir la palabra corito cuando fueran a decir, vamos a cantar un corito. Luego se le explicó al pastor que esta palabra es el diminutivo de la palabra coro y que como palabra rebuscada en el diccionario también aparece con el significado de estar en cueros o desnudo. Ha seguido persistiendo en su error y de igual forma con otras expresiones que ha prohibido en su congregación.

     Un buen ejemplo de una persona contumaz lo es Acab en 2 Crónicas capítulo 18 donde reconoce que Micaías es el profeta de Jehová y le dice las verdades que son en contra de sus obstinados errores. En el versículo 17 Micaías le profetiza lo que Jehová dice, que es contrario a lo que Acab quiere oír. En el versículo 29 sigue obstinado en mantener su error y va a la batalla disfrazado como si con eso arreglara las cosas a su favor para de todos modos tener él la razón a sabiendas que va en contra de Jehová.

     También he presenciado como han enseñado algo que luego se dan cuenta que está erróneo y no profundizan más porque han decidido mantenerse en su posición, siendo sin remedio unos contumaces. Ya no se humillan ante Dios y mantienen su error siendo unos engañadores y habladores de vanidad.

     En Proverbios 29:1 nos da una fuerte advertencia y dice: "El hombre que reprendido endurece la cerviz, de repente será quebrantado, y no habrá para él medicina."

     Por lo regular estas personas son sabios en su propia opinión y dicen que son los demás los que son sabios en su propia opinión y dan a entender, muchas veces con una falsa humildad, que ellos están en lo correcto. En Proverbios 30:12 dice: "Hay generación limpia en su propia opinión, Si bien no se ha limpiado de su inmundicia."

     Daré otros ejemplos sencillos del diario vivir. Una persona va a comprar un automóvil. De varios automóviles escoge uno. El vendedor lo convenció diciéndole todas las ventajas y cualidades buenas del auto y le oculta todos los defectos. La persona se convence y lo compra y se lo lleva. Luego se da cuenta que hizo una mala compra y descubre los defectos. Pero decide decir que hizo una buena compra y se jacta de esto. Persiste en decir que es un auto magnifico. Trata de convencerse y persiste en su error.

     De igual modo, han surgido otras sectas religiosas basadas en obstinados errores. Son sin remedio unos contumaces.